Cómo mantener un alto rendimiento bajo los riesgos de decisiones inexactas
Hacer las cosas bien no es una tarea fácil y requiere habilidades específicas para hacerlo.
El escenario en el que vivimos hoy, con tantas incertidumbres presentes en nuestro día a día, nos impone la condición de no tener margen para los errores. Veamos los siguientes casos:
▪️ Ejemplo 1: En una empresa, no todos los empleados presentan un alto desempeño en la realización de sus funciones. Pero cuando se trasladan a otros sectores, su productividad aumenta considerablemente.
▪️ Ejemplo 2: Un profesional de educación física puede perder clientes por no identificar exactamente qué ejercicios son los más preferidos por sus clientes para el desarrollo de cada grupo muscular.
▪️ Ejemplo 3: Un docente implementa nuevas metodologías de enseñanza en el ejercicio diario de sus clases sin haber prestado la debida atención a la efectividad de estos nuevos métodos en comparación con los existentes.
Hay que tener en cuenta que en todos los ejemplos anteriores siempre tenemos el mismo efecto; decisiones de gestión imprecisas que implican una reducción del beneficio.
Una forma de tener siempre un alto rendimiento es aplicar procesos antes de tomar una decisión.
Estos procesos se basan en pruebas de significancia que señalarán con precisión probabilística el mejor camino a seguir. Sin lugar a dudas cuando se aplica este método se toman mejores decisiones, lo que redundará en mayores ganancias.