La “Big Data” el nuevo poder de la democracia
Big data ¿Qué es? En palabras sintéticas es aquella herramienta que consiste en procesar y explotar masivamente grandes cantidades de datos para obtener información estratégica. Esta perspectiva ha sido progresivamente incorporada a las estrategias de marketing político y más específicamente a las campañas electorales.
Beatriz Busaniche de Fundación Vía Libre expresó en reiteradas ocasiones que “La Big Data se puede utilizar para mejorar políticas públicas”, lo cual no puede ser más acertado. Con la Big Data podemos realizar estrategia específica de comunicación. La efectividad de éstas estrategias fundadas sobre la Big Data se debe a que la información es entregada directamente por la población, la misma “Es una herramienta poderosa de conocimiento”, dirá Busaniche.
La especialista en derechos digitales analiza que “mal usada (la big data) puede generar un desequilibrio en la cancha electoral”. Agrega que también se generaría una práctica poco ética “cuando los partidos que están en el Gobierno y que tienen acceso privilegiado a bases de datos, utilicen esos datos con fines electorales sin la debida autorización de uso”.
Lo cierto es que los políticos todavía subestiman el uso de datos. En Argentina, el acceso a este tipo de estrategias que implican trabajar con datos múltiples, se concentra en Buenos Aires, donde operan las grandes compañías tecnológicas y de marketing que proveen estos servicios.
Como director de Reputación digital les puedo afirmar que, en la actualidad, “todos los partidos (grandes y chicos) están en condiciones de utilizar big data, no hay una limitación de ninguna naturaleza”
Aquellos que crean que los partidos mayoritarios cuentan con ciertas ventajas en el uso de big data, están errados, ya que la eficacia de una estrategia de comunicación política depende más del uso de tecnología, de la inteligencia y de la estrategia que le quieran poner quienes están haciendo comunicación, que de la administración de esos datos.
Los datos se pueden utilizar para elaborar perfiles, identificar tendencias y direccionar distintos tipos de mensajes a distintos públicos, o electores en este caso. Es por esto que tienen un valor económico en sí mismo. “El valor de una empresa depende de la disponibilidad de esos datos”.