Los riesgos de la manipulación
Ya hablamos con anterioridad de la manipulación y lo que trae consigo. Ahora bien, todo esto no tiene sólo una arista negativa: la indignación pública también tiene beneficios para la sociedad; al permitir que todos podamos castigar o al menos recriminar comportamientos censurados por la mayoría (como la corrupción), además de reforzar nuestra adhesión a una causa o a un grupo social con el que nos sentimos identificados.
Así mismo, aparecen al menos tres riesgos:
1° La posibilidad de que nuestra participación en movimientos cívicos y sociales sea menos significativa. Ya no nos hace falta cooperar como voluntarios o hacer donativos, nos sentimos satisfechos con “postear sobre el asunto”.
2° También se rebaja el listón de la indignación: como indignarnos es fácil, puede llegar un punto en el que no distingamos entre las ofensas reales y las cosas que solo nos resultan desagradables.
3° Nuestras opiniones se polarizan (tema ya conversado también). Las propias redes nos permiten agruparnos en cámaras de eco con audiencias similares.
Nos acostumbramos a dirigirnos a aquellos con quienes estamos de acuerdo, buscando ganar puntos con los nuestros, no iniciar una conversación.
Esto hace que el intercambio de opiniones con personas que piensan diferente (o que simplemente se han equivocado) se vea mediatizado (y caricaturizado) por otros miembros del grupo. No logramos tener conversaciones profundas que crucen barreras ideológicas ni con nuestros más cercanos y de hecho son extremadamente escasas en redes sociales.
¿Se puede evitar?
De entrada, aunque prestamos atención a la indignación y a la manipulación, nos mueven tanto las emociones negativas como las positivas. Es decir, también se promueven con facilidad movimientos de reconocimiento, amor y unión.
Otro punto clave esta en entender cómo nos motivan las emociones (indignación incluida). Esto nos ayuda a detenernos unos segundos antes de compartir o postear ciertos contenidos. Una vez más… el ejercicio de hacer “pausa” previo a compartir, re twittear, etc.